Capítulo 28 - "Esta es la mayor mierda que me prodría pasar"

Días para la boda: 14

[Justin]

De pequeño veia el despacho de mi padre como si fuera la guarida de un super heroe. Siempre me dejaba estár ahí, siempre y cuando no le molestase. Admiraba a mi padre, pensaba que era el hombre más bueno e increíble del mundo, que amaba a mamá por encima de todo y que me quería a mi por encima de todo menos mamá. Ahora ya no lo pienso.

Ahora veo lo que le hizo a mi madre desde hace años y eso para mi no tiene perdón. Haber tenido 2 hijos con otra mujer que no era mamá nunca debió haber sucedido. El primer niño pudo haber sido un descuido de una noche, pero el segundo significa que él estuvo viendo a esa mujer más veces. No voy a juzgar a esa mujer porque no sé su situación. No sé si sabe que mi padre estaba casado. 1 hijo secreto podría perdonarselo, con dificultad, pero lo haría. Pero 2 hijos ya no.

Mi padre se encontraba en su sillón de cuero, detrás del escritorio, revisando unos papeles de la empresa. Su mirada pasa un momento de los papeles a mi. Deja los papeles en la mesa bien colocados y me mira fijamente.

-Querías algo Justin?-pregunta mirándome. Yo avanzo de la puerta de entrada, de roble macizo por cierto, y me siento en una de las sillas de enfrente de la mesa. Las sillas eran aterciopeladas, negras de madera de roble. Desde luego nada baratas.

-Quiero proponerte algo. Algo muy importante- digo seriamente con las manos en puños en mis rodillas.

-Adelante, tú dirás Justin

-Quiero cambiar mi compromiso con Lyndsey - mi padre me miró con cara de que le explicara - quiero que Lyndsey cambie su compromiso conmigo a Trevor, y por lo tanto yo quede comprometido con ___. -Mi padre abrió los ojos y se echó a reír en carcajadas como si le hubiera gastado el mejor chiste del mundo.

-Es una muy buena broma Justin - dice aún riéndo, pero al ver que yo estoy serio se da cuenta de que no es ninguna broma y que estoy hablando con más seriedad de la que he hablado nunca. Se inclina hacia adelante con las manos entrelazadas y los codos en la mesa - Ni hablar, todos estáis comprometidos y no se puede romper un compromiso.

-Pero yo no amo a Lyndsey- digo empezándome a cabrear

-Aprenderás a amarla

-Yo amo a ___- me levanto golpeando la mesa

-No es posible Justin. eso significaría que ninguno obtendría una empresa. Solo tu hermano y Lyndsey, por ser los mayores.

-Me dá igual. Por mí como si me despojas de la herencia. No me voy a ocultar más.

-Estás engañando a tu prometida con ___?- dice furioso

-No me des sermones de como ser fiel a alguien. Porque que yo sepa yo no tengo 2 hijos con una persona que no es la mujer con la que estoy casado. Te creía un heroe papa, pero lo unico que eres es el villano del cuento. Ahora sé que volvías tarde de trabajar porque te acostabas con las secretarias, que te ibas de viaje cada dos por tres a lo que nosotros creíamos que eran viajes de negocios pero seguro que tienes una embarazada a cada punta del mundo- mi padre se levantó y me dió una bofetada que hizo girar mi cara y que me llevara la mano a la mandibula por el dolor.

-Soy tu padre, tenme respeto. Tú no eres mucho mejor. Te recuerdo la cantidad de veces que te cubría con tu madre por las chicas que llevabas cada noche.

-A diferencia de ti estaba soltero y sin compromiso, pero ahora estoy con ___. Y me da igual lo que hagas pero no conseguirás que me case con Lyndsey, y ella está de acuerdo con ello. Ella sabe lo de ___ y yo y nos apoya. Mamá también lo hace y la madre de ___ en el fondo también. Eres tú el único que se niega.- Furioso, salgo del despacho cerrando la puerta de un golpe. “Esta es la mayor mierda que me prodría pasar”.

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Sé que no es muy largo, apenas 1 página y algo más. El caso es que hasta que acabe el curso no tendré mucho tiempo para escribir y voy a escribir a ratos. Cuando acabe los globales tendré más tiempo y procuraré volver a escribir 1 capítulo por semana. Besos, Noelia

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