Capítulo 14 -"Abre los ojos princesa"

JUSTIN

Mi mano se extiende con el objetivo de ayudar a ___ a salir del coche. Estamos en el restaurante más prestigioso de la ciudad. Varias veces nuestras familias cenaron en este lugar. Su padre y el mío han sido como hermanos desde primaria.

Entrego mis llaves al cochero. Mi mano, en ningún momento, suelta la suya. Entré en el establecimiento con ___ a mi lado, con su hermosa sonrisa que no abandona su cara. Nos acercamos al Mètre, en una especie de recepción que impide el paso, a no ser que este lo permita, al salón.

Este alza la cabeza y mira atentamente a mi dirección y luego a la de ___ para volver su vista a la mía.

-Bienvenido a Vacaro’s. Puedo ayudarles en algo señores?- pregunta mirándonos y con un tono de voz como si se estuviera diciendo a sí mismo “Otros pobretones en busca de romanticismo”. Como si no fuera capaz de permitirme este lugar

-Realicé una reserva a nombre de Bieber esta misma mañana- el mètre me miró sorprendido de que yo fuera un Bieber, claramente uno de los herederos de Bieber S.A. Interprises.

-Mmm… acompañenme Señor Bieber-dijo con un cierto toque de nerviosismo- y señorita

-Rout, ___ Rout- dijo esta vez ___. El mètre se tensionó claramente. Esta más que claro que sabe que es la hija de George Rout, dueño de Rout’s Tecnology S.A. y de Angelina Rout creadora de la agencia de moda Angel’s Fashion.

El m`tre abre la puerta que dirige al salón y hace una seña para llamar a uno de los camareros. Un chico, de unos 20 años, que inmediatamente posa su mirada en el cuerpo de ___, MI ___. Mía. Lo pilla? Mía. No suya

-Sebastian, acompañe al Señor Bieber y a la señorita Rout a la mesa 17- el tipejo ese, Sebastian, nos hizo una seña para pedirnos, educadamente, que le siguiésemos.

La mesa estaba decorada con un mantel rojo con bordados en dorado y velas en el centro de la mesa.

Él, apartó la silla de ___, para que se sentara, y ___ le hizo una seña de agradecimiento… concretamente, le sonrió. Nos entregó a ambos una carta y se alejó.

-Como vuelva a mirarte de esa manera no volverá a trabajar en esta ciudad- vale, celoso? Imposible más

-Justin…porque ese repentino ataque de celos? Estoy contigo no con él.

-Lo sé- le cojo de la mano y depositó un suave beso sobre ella- es solo que quiero asegurarme de que él lo sepa- miro mi carta- Que quieres pedir?

-Lo que tu comas-trampa, ella sabe que escogeré espaguettis. si, sé que parezco un niño, pero es que me encantan. Hago una seña para que venga un camarero. Para mi desgracia quien nos atiende es, nada más y nada menos, Sebastian.

-Saben ya que van a comer señores?

-Para beber queremos el mejor Champain que tengan. Comeremos los dos Ensalada de Caesar de primer plato y de segundo plato Filet Mignon acompañado de la salsa MiDislas

-Desean pedir ya el postre señores?- hago una seña hacia ___ indicándole que elija ella

-Ummm… tomaremos una copa de helado de nata y chocolate para los dos.

Se volvió a alejar y volví a coger su mano

-Estas preciosa, aunque siempre lo estas, pero hoy más que nunca- noto como el color sube a sus mejillas, que estan notablemente rojas, ademas de que sonrie de manera tímida y agacha la cabeza metiéndose un mechón de pelo tras la oreja. Sí, definitivamente le ha dado vergüenza.

-Tu también estas muy guapo Justin

La cena transcurrió entre risas y algún que otro beso, y aún faltaba el postre. Además de que estoy esperando salir de aquí para mostrarle la sorpresa que tengo para ella.

-Vamos a la pista?- preguntó ___. Se le notaría la ilusión que le hace eso a quilometros de distancia

La verdad, nos sé como hacen para negarle algo a ella, yo no puedo. Es mi princesa, no puedo negarle nada.

-Está bien, vamos- me levanté de la mesa y tendí mi mano para llevarla, la cuál ella aceptó. Se levantó y nos acercamos al centro de la pista. Agarré de su cintura y posé mi mano en ella. ___ Apoyó su mano libre en mi cuello, proporcionandole a este las suaves caricias que me proporciona su mano. ___ apoya su cabeza sobre mi pecho y noto como sus ojos se cierran dejando que su respiración se haga más lenta, dejando que así, ambos, nos dejemos llevar por el suave ritmo de la música.

-Puedo quitarme ya la maldita venda- se quejó otra vez

-Cuida esa boquita o tendré que hacer algo con ella- dije con un tono de voz pícaro. ella soltó una risita que me encanta- estamos casi...solo espera un poquito. Vale ahora sientate con cuidado- ella se sentó con mi ayuda- te voy a quitar la venda, pero no puedes abrir los ojos hasta que te diga- ella asintió y yo deshice suavemente el nudo de la venda y se lo quité- ahora… abre los ojos princesa

-Madre mía - su cara era una cara perfecta de OMG- esto es...es...es increíble



Os ha gustado el capítulo. Siento no haber subido antes de ayer como prometí, pero no me encontraba con la suficiente inspiración como para subir el capítulo. Aquí os queda. Celosillo que es mi niño.