Capítulo 10 "La joya más preciada"

<<I am frozen out of bed you've cut me open and stripped me bare. No masquerade or scape from you I'm the mirage you see through>>
Así suena la alarma del despertador de mi Iphone. “Still” de Auryn, un grupo español que además de cantar en español, también canta en inglés. Me levanto perezosa, pero también sonriente. Sigo sin poder creer que lo que pasó anoche fuera real y no un sueño. 9:30. Justin pasará por mi a las 11, así que tengo que arreglarme. Este día va a ser increíble.
Me levanto de la cama y me dirijo directamente al baño de mi dormitorio. me despojo del pijama quedando desnuda ante el espejo. Me fijo en mi cara practicamente corrida de maquillaje. Cojo un algodón y lo humedezco con el líquido desmaquillante para desmaquillarme. Una vez desmaquillada. abro el grifo esperando a que este alcance la temperatura perfecta. Me introduzco en la bañera hundiéndome hasta el cuello y, dejándome llevar por el relax, empiezo a recordar los momentos de la noche de ayer
<<-LLevo enamorada de ti desde los malditos 15 años- él se quedó como en estado de shock- No te puedes ni imaginar lo mal que me sentía cuando me hablabas de tus proezas con otras chicas, o cuando las huecas estupidas que iban detrás de ti me suplicaban que les ayudase a conseguirles un lío contigo. Todo el tiempo lo hacía por ser buena amiga, pero lo único que quería era ser yo esas estúpidas huecas que tenían la maldita suerte. Pero tampoco las culpo por que seas practicamente perfecto y seas tan dulce y tan…-no pude seguir porque en ese momento sentí algo presionando mis labios y para cuando me quise dar cuenta eran los labios de Justin los que presionaban los mío en un dulce beso. No daba reaccionado, quería reaccionar, pero no sé porque no lo hacía. Justin empezó a alejarse y fue entonces cuando reaccioné y le pegué a mi agarrandole de la nuca. Notaba como sus brazos me rodearon con fuerza y me levantó un poco de manera que solo quedé en puntillas.>>
<<-Seremos como Romeo y Julieta. Solo que ninguno de los 2 morirá. Podrémos estar juntos en la universidad. Tener citas, besos…. aunque sean a escondidas, pero la verdad es que eso lo hace más interesante- me reí ante mi idea- y si tu quieres- me miró fijamente- entregarnos el uno al otro>>
<<-No sabes lo feliz que soy en este momento-me dió un beso corto-te amo>>
Sí, definitivamente, fue la mejor noche de mi vida… y solo una cosa podría hacer una noche mejor, y eso….todos sabemos lo que es.
Salí de la bañera enredándome una toalla en el cuerpo, tapando mi desnudez. Me dirigí hacia el vestidor y empecé a buscar. Tenía que ir perfecta para él. Cogí una de mis faldas favoritas. Era una falda blanca  con volantes horizontales y con estampado floral en tonos rosas y verdes. LLegaba hasta la cintura con una goma ancha a modo de cinturón. Su longitud era hasta poco más de la mitad del muslo. Cogí una camiseta de tirantes en crudo, es decir, blanco roto. Agarré unos zapatos de cuña color camel de unos 7 cm.
Me vestí y entré en el baño de nuevo. Me alisé el pelo. No me lleva demasiado, puesto que lo tengo medio ondulado. Me lo dejé con la raya al lado derecho. Abro mi cajón. No es un cajón cualquiera. En ese cajón tengo un arsenal completo de maquillaje. en otro al lado tengo los productos de hidratación y exfoliación y en otro, más pequeño, el equipo de manicura. Amo la cosmética. Pero no me gusta ir como una puerca, solo me maquillo lo suficiente como para resaltar ciertos rasgos y ocultar otros. Como por ejemplo los lunares que tengo en mi nariz. No los puedo tapar del todo, pero quedan mucho más disimulados. Aunque Justin dice que le encantan mis lunares, dice que le dan un aire infantil a mi rostro.
Cojo la base de maquillaje y con un pincel la esparzo por la cara uniformemente. Me retoco con las manos para exparcirlo bien del todo y agarro los polvos. Enfoco la mayor parte en el punto cruz, los mofletes y la nariz. Me decanto por ponerme una sombra marrón con un toque brillante, degrandandola, y con un delineador marrón chocolate, casi negro. Me pongo el rimel y por último cojo el brillo de labios rosa pálido. Me encanta como queda con mi tono de piel. Además, hace que mis labios parezcan más voluminosos. Me miro bien en el espejo. Perfecta. Salgo de la habitación y voy al joyero. Saco una de mis cadenas favortias. Es de oro. Es un conjunto de dos cadenas. Una es gruesa, mientras que la otra es más fina. Me pongo la pulsera que me regaló Justin a mis 18 años. Era una pulsera de cadena  de oro, que colgaba una rosa blanca tirando a crudo, un cupido de oro con su arco y su flecha, apuntando a otro colgante que era un corazón. El último colgante son unas bailarinas, una de ellas es del mismo color que la rosa y la otra es de oro. Es la joya más preciada y con más valor que tengo, pero no por lo que pudo costar. Sino por quien proviene. Y después de anoche. ahora comprendo lo que significa cada colgante. Me compara con una rosa, para decirme que soy bella. Las bailarinas muestran mi mayor pasión y mi primer amor desde pequeña y por último. El corazón y el cupido significan que estaba enamorado de mi y que quería que cupido clavara una flecha de amor en mi corazón. Esta pulsera y las bailarinas fueron los mejores regalos que tuve, y ambos eran de él.
10:17. Será mejor que termine de arreglarme y baje a desayunar.
Agarré un bolso clutch de cuero camel con tachuelas y guardé mi Iphone, mis tarjetas y algo de dinero en efectivo.
Mierda. Los pendientes. Casi me olvidaba de ellos. Volví al joyero y cogí unos pendientes con forma de rosa de oro.
Ahora sí. Agarré el bolso el bolso y bajé por las escaleras hasta la cocina. Marie no estaba al parecer. Claro, mis padres le dieron la mañana libre. Pero me dejó las cosas, para prepararme el desayuno yo misma, ya preparadas. Cogí la leche y  llené el tazón hasta arriba. Le eché el cola-cao y lo puse a calentar en el microondas. Cogí la jarra con el zumo exprimido y me lo serví en el vaso. tenía bastante hambre, así que cogí un croasand y unas 2 tostadas. Abrí el croasand y le unté nocilla por dentro a ambas rebanadas. Como a mí me gusta. En las tostadas les unté mantequilla con mermelada de melocotón.
<<Pin>>
El microondas sonó. Lo abrí y saqué la leche dejándola en la isla de la cocina. Transporté el resto y empecé a desayunar. agarré el mando de la tele de la cocina y la encendí. MTV. Estaban con Best dance Crew. Raro. LOs sábados se pasan la mañana con musica. Yo me decanto por “8 Flavers”. Aunque “Funny Crew”, no eran nada malos la verdad. Pero es que unas niñas capaces de hacer eso es increíble. Algún día me gustaría participar en ese programa, pero mientras esté en Juliart, no podemos bailar fuera de la academia, de forma renumerada, es decir, siendo pagados por ello. 10:34. Aún faltaba un rato para que Justin viniera a por mi. Mi movil sonó desde mi bolso. Lo abrí y era Justin. Que no sea para cancelarlo.
<<-Hola- dce con una voz sensual
-Hola preciosa- me mordí el labio al oírle decir eso.
-Pasa algo Justin?
-Si… es bueno, pero a lo mejor malo
-Si tienes que cancelar lo de hoy, lo entiendo no pasa nada-soné triste, a pesar de que intenté sonar normal
-Que?! No! Ni hablar! es que no podía aguantar más y ya estoy enfrente a tu casa. Me estaba desesperando en mi casa. Pero digo que es malo, porque a lo mejor no estas lista
-Me tomo el zumo y me llevo mi croasand por el camino
-Tranquila, termina de desayunar, yo puedo esperar un poco más
-Ni hablar bajo ahora>>
Le colgué para que no tuviera tiempo a revatir. Me bebí rápido lo que quedaba de zumo y cogí la otra mitad del croasand que me quedaba y salí con mi clutch colgado de un hombro y comiendo mi croasand. Lo embullí todo antes de salir por la puerta principal. Divisé a Justin apoyado en su moto. LLevaba unos pantalones vaqueros negros colgando de la mitad de su culo. Típico de él. Una camiseta negra, una cazadora vaquera que tenía bordada en dorado “BIEBER” y “BELIEVE” por detrás y chapas y una cadena. La llevaba remangada por encima de los codos. Llevaba una cadena de oro con una ala de angel y su, como no, Supras. esta vez en dorado y con unas alas. En definitiva, estaba para comerselo. Además llevaba el pelo peinado a lo “No me lo he tocado al despertarme”

Sin apenas darme cuanta por lo embelesada que estaba ya estaba fuera de la propiedad. Entonces fue cuando él se incorporó y me sonrió haciendome una seña para que me acercara. Me acerqué y en el momento en el que lo tenía junto a mi… lo besé (pinchar enlace). Pasé mi brazo derecho por su cuello subiendo hasta su nuca y rodeando el cuello con el otro brazo. Mientras que él posó sus manos en mi espalda. No era un beso ardiente. Era simple. Un beso, un beso que transmitía lo que yo quería transmitir, que le amaba.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Capítulo 13

Capítulo 12 (Leer el final, si es que queréis el próximo capítulo)

Capitulo 20 - parte 1 (leer el final)